El pasado día tres de abril estuvimos en el concierto de Franz Ferdinand en Madrid. El lugar elegido fue el Palacio de los Deportes, y según he leído en algún medio se congregaron cerca de quince mil personas para ver el concierto. El concierto resultó muy divertido pero el único problema que tuvimos es que, al estar lejos del escenario (no porque nosotros quisiéramos sino porque el aforo estaba completo en el backstage y en la planta baja),se veía más bien poco. Qué pena que los organizadores no hubieren pensado en poner retransmitir a través de unas hermosas pantallas (en ese momento apagadas) el directo. De todas formas tocaron con mucha calidad.
Aquí podéis ver la crónica de El mundo.
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